MARIO GALVANI SE ADELANTO A LA EPOCA DE LA COMUNICACION DEPORTIVA RADIAL

Un pionero que comenzó a soñar desde niño con el aroma verde de las canchas de fúbol y los micrófonos para el deporte

Hace pocos días, al inicio de la temporada oficial del fútbol aficionado de Curanilahue, se entregó una distinción a varios de los más antiguos comentaristas radiales de deporte entre los que me cuento por ser el iniciador de programas y transmisiones deportivas, tanto de radio como de televisión a nivel de la comuna. Hasta ahí todo perfecto, pero como siempre me gusta buscarle las cinco patas al gato me comencé a preguntar. ¿Sabrá toda esta gente y especialmente entre los colegas cómo nace esto en la provincia de Arauco?

Decir, primero, que en la actualidad no es difícil ser comentarista deportivo, ya que los medios de comunicación nacionales e internacionales nos traen diferentes modelos y muchos, después de escuchar estilos y formas, van puliendo sus estilos para acercarse lo más posible a su modelo; es más, los propios planes de estudio de educación básica o media preparan a los alumnos enseñándoles diversas técnicas de periodismo que pueden, en la práctica, utilizarse.

Lejano está el tiempo en que un niño, amante del deporte y que había bautizado con el nombre de Dínamo al club de sus amores, nos deleitaba hablándonos de alineaciones de mundiales realizados en fechas en que él ni siquiera había nacido, o recordándonos las programaciones profesionales del fin de semana próximo o del siguiente.

Se pierden en el tiempo las ideas sobre selecciones, biografías de jugadores, estilos y formas de juego, tácticas que debía o emplear determinado técnico, que emanaban de un pequeño prodigio que seguramente soñaba con llegar a emular a alguien en la radio y sentir ingresar por los orificios nasales el aroma del pasto de la cancha de fútbol o el especial brillo de las luces.

Hoy, él ya es un adulto como todos nosotros, pero aún recuerdo cuando Mario “Galvani” Aravena Sáez, el niño de quién hago recuerdo, siendo un adolescente, inició en CD 158 Radio Millaray de Cañete su programa de comentarios deportivos, faltar a la verdad sería fácil y decir que fue comprendido y que todos aplaudieron su iniciativa; pero, no fue así. Tuvo muchos inconvenientes y reticencias, posiblemente porque en sus comentarios (de los que hace unos días escuchaba una grabación), muestra ideas claras y progresistas para la época.

También colegas de radio pusieron obstáculos para su labor pionera; aunque pudimos verlo pujando por las transmisiones radiales del fútbol (aunque estas se habían realizado con la existencia de Radio Tucapel), así pasó varios años en Cañete, su pueblo natal, varias ocasiones me solicitó lo reemplazará en programas de los cuales debió estar ausente (creo que entre otras cosas por ser locutor y porque durante 10 años fui delegado del club Vialidad, hoy Municipal, en la Asociación de Fútbol de Cañete, donde también fui dirigente y árbitro). Por mi parte, y para no ser menos, solicité su participación en el informativo comunal diario que el año 1980 creé y dirigí en Radio Millaray CD 158 bajo en nombre de “24 Horas”, leído por Germán Salas y Pedro Mendoza y radiocontrolado por Francisco Flores.

Nueve años después, el 10 de enero de 1989, en Curanilahue, con el recuerdo del pionero “Galvani” Aravena inicié en esta ciudad el trabajo deportivo en radio Proyección F.M. con el programa “Aquí Deporte” que después se trasladó a la televisión y que sirvió de base para que otros colegas iniciaran un exitoso y bien recibido trabajo de difusión.

Inmediatamente nace la pregunta ¿habría sido posible este trabajo si no hubiera sido por el entusiasmo y empeño que a pesar de los incomprendidos puso Mario Aravena Sáez en hacer realidad está actividad dentro del mundo de la radio en la provincia de Arauco?

Saludos, hacia dónde estés querido amigo Mario, gracias por el Diploma que me entregó la Asociación de Fútbol de Curanilahue y que no recuerdo el deporte de Cañete te haya entregado a ti (o me equivoco) por tú trabajo pionero, desinteresado.

Gracias amigo y felicidades, aunque hace más de 20 años que no nos vemos.

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